Ver tanto The OC no es bueno.

Agh, y doblemente Agh.
Estoy en esos bonitos días adolescentes de inseguridad y desconfianza.
No me veo ni lo suficientemente gorda como para deprimirme y abandonarme al consuelo del chocolate y los dulces, ni lo suficientemente delgada como para no pasar hambre y auto convencerme de que esto merece la pena.
Vuelvo a la dieta. Y a mi dieta especifica de los fines de semana. Solo fruta.
Soy una frutífera. Una frutífera, que no fructífera, ya que con mi vida no he hecho nada más interesante que tirarme en la cama, terminar de ver todas las temporadas de The Gilmore Girls, y empezar con The OC de nuevo.
E idolatrar a Seth Cohen. Quiero un Seth en mi vida. Guapo, arregladamente desaliñado, skater, que escuche música decente, ironico (muy iroooooonico por favor), rarito, con sentido del humor e inteligente. Pido mucho verdad? Lo sé, lo sé. Pero soñar es gratis.
Como también lo son los gritos. Y en mi casa hay oferta de dos por uno, porque mi madre se va a dejar la garganta la pobre. Que si estoy anoréxica, que si estoy obsesionada, que si que si… que si todo!
Quesito, la voy a llamar a partir de ahora.

En fin, que dura es mi vida, como esto siga asi, hago honor de mi emosidad y me corto las venas. Ah no! Que hacer bromas sobre eso no mola nada. Pero la gente que es guay y no tiene ni zorra de las cosas las hace. Pero hay de tantas cosas que no tengo ni zorra…

Como los hombres. Alguien me lo explica? Un tio con el que no tienes nada y que solo le interesas en un único sentido (en el cual se necesitaría un profiláctico de por medio) se pica porque quedas con otro tio. Opps, no debería decir estas cosas, que como soy una persona a la que la gente cotillea, (o pongamos mejor el tiempo en pasado) el fotolog, que se sabían mi vida (culpa mía por contarla) y me observaban (barra idolatraban equis numero de personas por motivos que aun desconozco) a mi y todas mis fotos/amigos/moviemientos/acciones, seguro que leen esto también. Ah! Ya no, que esto es mas intimo, y no me lee/escribe ni peter.

Dios, como mola.

Ay que ver que ególatra soy. Como me dejen cuento mi vida, me pongo en un pedestal, me bajo, y me vuelvo a subir. Y os dejo con mi foto, que para eso salgo tan mona.